Buscando En El Armario | Adriana Arboleda como diseñadora de moda con impacto social

Adriana Arboleda como diseñadora de moda con impacto social

En Colombia hay mujeres que han sabido reinventarse sin perder su esencia, y Adriana Arboleda es una de ellas. Conocida por años como una de las modelos más emblemáticas del país, hoy su nombre también resuena en los talleres, en las perchas y en las etiquetas que llevan un mensaje más allá de la estética. Pink Filosofy, la marca que fundó junto a Johanna Ortiz, se ha convertido en una propuesta de moda femenina con impacto social y mirada consciente. Desde la pasarela hasta la mesa de diseño, Adriana ha construido un lenguaje propio donde la belleza se expresa con propósito.

Conversamos con ella para entender mejor este recorrido que, aunque comenzó hace más de una década, sigue evolucionando con coherencia, sensibilidad y firmeza.

¿Cómo nace la idea de crear Pink Filosofy?
Después de tantos años en la moda, sentía que quería devolverle algo a mi ciudad, a las mujeres que me han inspirado, y al mismo tiempo crear algo propio. Con Johanna Ortiz compartíamos esa inquietud: hacer empresa con sentido social, sin perder el gusto por el diseño cuidado y femenino. Así nació Pink Filosofy, trabajando de la mano con mujeres cabeza de hogar, en talleres que más que producir ropa, construyen historias.

¿Qué representa para ti esta marca?
Pink Filosofy es más que una marca de ropa. Es una forma de ver la vida, de elegir la calma y la belleza sin ruido. Pensamos cada prenda como una extensión del alma de quien la lleva, por eso es tan importante para nosotras que sea cómoda, atemporal y emocionalmente cercana. No es solo lo que se ve, es lo que se siente al vestirla.

¿Cómo ha sido el proceso creativo entre Johanna y tú?
Desde el inicio hemos compartido la visión y la pasión por los detalles. Ambas participamos en el concepto, en el diseño y en toda la construcción del universo de la marca. No fue un rol simbólico, sino un trabajo real. Nos complementamos bien y eso se nota en lo que logramos juntas. Con el tiempo, también hemos aprendido a dejar que la marca respire y crezca con su propia identidad.

¿Cuál es la estética que define sus colecciones hoy?
La elegancia sin esfuerzo. Prendas sueltas, tejidos nobles, colores tierra, piezas que fluyen con el cuerpo. Nos inspiramos mucho en la naturaleza, en la vida real, en lo que una mujer necesita para vivir su día con armonía. Hay una mezcla entre lo romántico y lo sobrio, sin exageraciones. Vestirse también puede ser un acto de paz.

¿Qué hace diferente a Pink Filosofy en un mercado tan saturado?
El compromiso con lo local y con el alma de cada prenda. Siempre decimos que es lujo al alcance de todas, pero no solo por el precio: es por el cuidado en los procesos, por el respeto a quienes hacen parte de la cadena y por esa idea de que vestirse bien no tiene que ser sinónimo de exclusividad, sino de conciencia.

¿Dónde pueden encontrarse actualmente sus prendas?
Estamos en varias ciudades de Colombia como Cali, Bogotá y Barranquilla, y también en algunas boutiques en Medellín, Pereira y otras regiones. Además, nuestra tienda online nos ha permitido llegar más lejos, incluso fuera del país. Queremos que más mujeres encuentren en Pink Filosofy una manera de vestirse con intención y ligereza.

¿Cómo te ha cambiado esta nueva faceta profesional?
Me ha completado. Durante muchos años fui imagen, ahora soy parte del proceso creativo. Eso transforma la forma en la que veo la moda y también cómo me veo a mí misma. Ya no estoy solo al frente de una cámara, ahora estoy detrás de muchas decisiones que impactan vidas. Eso me hace sentir más conectada con lo que soy y con lo que quiero aportar.


Detrás del diseño y la intención

¿Qué diferencia a Pink Filosofy de otras marcas colombianas?

La intención. Cada prenda está pensada para acompañar a una mujer real en su vida diaria, con tejidos nobles, diseño versátil y producción ética. Es una marca que cuida de quien la usa y de quien la crea.

¿Se puede hacer moda sostenible en Colombia?

Sí, y se debe. Lo hemos comprobado al trabajar con comunidades, valorando cada etapa del proceso. La sostenibilidad no es una tendencia para nosotras, es una decisión consciente desde el origen.

¿Qué consejo le darías a una mujer que quiere emprender en la moda hoy?

Que empiece con propósito. La moda es hermosa, pero también exige mucha constancia. Si tienes claro tu “para qué”, eso se notará en cada puntada. Y que no olvide disfrutarlo: crear también es una forma de amar.

Cuando crear también es sanar

Adriana Arboleda no dejó de ser modelo, solo transformó el concepto. Ahora modela una forma de hacer moda donde la belleza incluye, donde el lujo no se disfraza y donde cada tela cuenta algo más que una tendencia. Su historia es la de muchas mujeres que descubren que el verdadero poder está en ponerle alma a lo que se hace. Si quieres seguir explorando cómo la moda puede ser también un acto de cuidado, entra a nuestra sección Diseñadores y Eventos, donde el estilo siempre tiene historia.

Esta entrevista fue publicada originalmente en 2011 y ha sido actualizada en 2025 para seguir contando una historia que inspira, evoluciona y deja huella en la moda colombiana.

Zeen is a next generation WordPress theme. It’s powerful, beautifully designed and comes with everything you need to engage your visitors and increase conversions.

Top 3 Stories